La industria del viaje corporativo empieza a cambiar de actores, saliendo a la luz la generación millennial (nacidos entre 1982 y 1994) y la generación Z (nacidos entre 1995 y 2009). Sus preferencias, motivaciones y la mentalidad de estos viajeros y directivos “jóvenes” está transformando los viajes de negocios de manera significativa. A medida que esta generación se convierte en una parte dominante de la fuerza laboral, sus prioridades y expectativas están cambiando la forma en que las empresas gestionan y organizan los viajes de negocio.
Estas generaciones pretenden profundizar en el corazón de los viajes de negocios, examinando latecnología, preocupándose por su entorno, las actividades en destino, definiendo los patrones de gasto y poniendo énfasis en el turismo sostenible.
Los millennials y generación Z, tienen preferencia por herramientas digitales, están altamente conectados y prefieren usar aplicaciones móviles y plataformas digitales para gestionar sus viajes. Desde la reserva de vuelos y hoteles hasta el check-in y la planificación de itinerarios, ellos dependen en gran medida de la tecnología. Prefieren tener control total sobre la planificación y gestión de sus viajes. Es probable que busquen plataformas que les permitan hacer reservas y cambios de forma autónoma, en lugar de depender de agencias de viajes tradicionales. Ellos son nómadas digitales.
Muchos millennials y generación Z; aprovechan los viajes de negocios para convertirse temporalmente en «nómadas digitales», trabajando desde diferentes ubicaciones mientras están en el destino de trabajo.
A estas generaciones les preocupa mucho el bienestar personal y el equilibrio entre su vida laboral y personal. Por lo tanto, valoran las políticas de viajes más flexibles y diáfanas, no quieren políticas exigentes o agotadoras, y aprecian el tiempo libre después de viajes largos o extenuantes. Prefieren evitar el agotamiento laboral, y; a diferencia de generaciones anteriores que buscaban más eficiencia y comodidad en los viajes de negocios, los millennials y generación Z valoran la experiencia en su conjunto. Por ello prefieren alojarse en lugares que ofrezcan una experiencia distinta, como hoteles boutique o alojamientos locales con encanto, en lugar de cadenas hoteleras genéricas. La estética, la originalidad y la ubicación son claves para disfrutar de la gastronomía local y participar en actividades que les permitan sumergirse en la cultura del destino.
Estas generaciones valoran que las empresas ofrezcan medidas de seguridad durante los viajes, como acceso a asistencia 24/7, seguros de viaje, e información actualizada sobre las condiciones en los destinos. Ambas generaciones están muy atentas a las cuestiones de salud y aprecian que las empresas les ofrezcan opciones seguras y protocolos claros en sus políticas de viajes.
Estas generaciones empiezan a combinar viajes de negocios con experiencias personales y de ocio. Este fenómeno conocido como bleisure está en auge, ya que muchos prefieren extender sus estancias para explorar el destino una vez que terminan sus compromisos laborales. Su combinación de trabajo y ocio hace que se estén flexibilizando los itinerarios en las compañías, permitiéndoles aprovechar al máximo la experiencia del destino fuera del horario laboral.
Ellos siempre esperan que las políticas de viajes corporativos ofrezcan más margen para decisiones personales, permitiendo cierta flexibilidad en la elección de vuelos, hoteles y comidas, incluso si esto implica un pequeño aumento en los costos. Por ello valoran trabajar para empresas que demuestren un compromiso con el empleado con prácticas responsables y adquiriendo independencia en la toma de decisiones y control de gasto. Los millennials y generación Z, buscan maximizar los beneficios de los programas de fidelización, ya que valoran acumular puntos y beneficios que puedan aprovechar en sus viajes personales.
Estas generaciones tienden a ser más conscientes de los impactos ambientales y sociales. En los viajes de negocios, prefieren elegir opciones más sostenibles, como vuelos de bajo impacto ambiental, hoteles que practican la sostenibilidad y el uso de transporte público en lugar de alquiler de coches. Valoran empresas que demuestren un compromiso con prácticas responsables y que les den la opción de elegir viajes que minimicen su huella de carbono.
Cabe destacar que lasempresas que ofrecen programas de bienestar para empleados que viajan (como membresías de gimnasio, dietas saludables, opciones de relajación) son mejor valoradas por los millennials y generación Z.
En resumen, los viajes de negocios para los millennials y generación Z son más que una simple tarea laboral; se centran en el equilibrio entre la eficiencia, la experiencia y el bienestar personal. Las empresas que adaptan sus políticas para incluir flexibilidad, tecnología, sostenibilidad y experiencias personalizadas probablemente atraigan a este grupo y les proporcionen mejores experiencias laborales.
Para estas generaciones, los viajes de negocios son una oportunidad para construir redes de contactos y conectar con otros profesionales en sus destinos, a menudo participando en eventos o actividades locales para expandir sus relaciones laborales.
Firmado por André Ibañez, Head of Marketing, Communications, Travel, Meetings & Events en Rheinmetall Expal Munitions S.A.U.