- Volver a situarse en el punto en el que estábamos, ese era el horizonte más anhelado para el sector de los hoteles en el año 2021
Todas las comparativas siempre tienen ese punto de referencia, quedarnos como estábamos en el 2019. En cualquier otra situación siempre hay referentes y en está, todo era nuevo para todos, por lo tanto, cualquier acción mal dada podría llevarse por delante un negocio de años.
El peso que la hotelería ha tenido que mantener ha sido mucho, había que ser cauteloso y estar muy atento a los impedimentos que existían para relanzar los viajes de negocios y ver en qué medida dependía del hotel y cuales pertenecía a administraciones o gobiernos en general. El Territorio Nacional fue el primero en impulsar el movimiento hacía lo que sería la “normalidad”. Se hizo análisis de situación, haciendo aperturas según destinos recurrentes, se preparó a los equipos de los hoteles y se prepararon encuestas para los clientes en las que se analizaran los miedos, a la hora de pernoctar.
Inseguridad en el viaje, la limpieza anti-covid, contagiarse, tener Room Service disponible eran algunos de los puntos que preocupaban. Esto hizo preparar a los hoteles con medidas para la reducción de riesgos higiénico-sanitarios; alfombrillas desinfectantes en la entrada de los hoteles, gel hidroalcohólico, pinzas individuales en el desayunador, etc….
El esfuerzo realizado por parte de los empresarios a sacar adelante el negocio, las necesidades por parte de las empresas por efectuar viajes de negocios, y el equilibrio en vacunaciones, fue limando los miedos, hasta ir llegando al tan ansiado restablecimiento de pernoctaciones, que fueran más normalizadas. La seguridad del viajero ayudó poco a poco a reiniciar el viaje corporativo.
Como decía Andrew Carnegie, empresario estadounidense, el mejor momento para expandirse es cuando nadie se atreve a tomar riesgos. Es el momento de escuchar, oír que se espera de los establecimientos hoteleros y como vivir la experiencia de pernoctar.
Los Hoteles corporativos están preparándose en al “además de… “. Se han dado cuenta que no sólo el alojamiento es importante, es esencial crear un todo para que el cliente se sienta como en casa.
La situación pandémica ha asentado modalidades como el teletrabajo, en el que los hoteles han tomado buena cuenta y han sabido conectar con el cliente facilitando el “Workation”, lugares cómodos y tecnológicamente preparados para que cualquier empleado, pueda teletrabajar, independientemente de donde este su sede, y disfrutando de un destino cómodo y tranquilo.
Agilizar los trámites de checkin y checkout para perder el menor tiempo posible, es vital para que el cliente no pierda tiempo en procesos. También cabe destacar, la tecnología centrada en mejorar la experiencia del cliente utilizando bots e inteligencia artificial, para que desde su habitación, tenga disponible toda la información, que tanto el hotel como el destino, puedan ofrecerle.
Y sin lugar a dudas la palabra más oída y más solicitada en los últimos tiempos, la sostenibilidad. Es indispensable que los hoteles apliquen el mayor esfuerzo en ser sostenibles, en adecuar cada uno de los departamentos, mínimo impacto ambiental, energías renovables, amenitis con envases biodegradables…
Muchos hoteles están ya trabajando en este ámbito de la sostenibilidad con numerosa iniciativas para que la estancia del cliente no genere CO2, y que sea lo más sostenible posible.
No cabe otra que seguir avanzando, seguir escuchando las necesidades del sector y animando a pernoctar en nuestros establecimientos sintiendo que en cada hotel esta la casa de cada uno de nuestros clientes.